Que semanita tuvimos ,¿eh?
En fin, ya está aprobado. Falta solamente la firma de la Presidente.
Y el 13 de agosto es el primer matrimonio entre dos señores que, cuando les dijeron que ya estaba hecho, salieron corriendo a pedir el turno en el Registro Civil.
Y me alegro mucho.
Mi lesbiana interior está contenta por todas aquellas personas que hace años comparten sus vidas y se despiertan todos los días al lado de la persona que aman (Amén), y si deciden dar el siguiente paso, ni la iglesia ni monseñor Urbanc (que se las da de caballero cruzado en medio de una guerra santa, por eso dejé de ir a misa) se lo podrán impedir.
Falta mucho todavía.
Se que a algunos no les va a gustar que dos personas del mismo sexo que se aman, se casen porque "es el fin de la civilización"(?), pero quiero recordarles a estos soretes en pala, que en la decada de 1880, la Iglesia se oponía a casar a "extranjeros, inmigrantes y a todo aquel que no sea indubitablemente del país" porque también se iba a acabar el mundo.
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Tengo duda... la podonga... (badumm tsss)
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Y a los que esperaban una oleada de casamientos gay, vayanse a cagar.
Tampoco todos quieren casarse y adoptar.
Son como usted, señora. No porque le digan que puede, lo va a hacer si no quiere, ¿cierto? Mmm...
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Y quiero darle la bienvenida a nuestro nuevo superhéroe:
¡¡¡SUPER GAY!!!
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En cuanto a la adopción, estoy de acuerdo con que puedan hacerlo.
Después de todo, llegar a esa decisión implica que se tiene un contenedor de cariño para repartir, y que mejor forma que dárselo a un hijo.
Y el que diga que no es así, me interesa tres porotos.
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