Conchones de calores...

Hemos pasado por días en que la temperatura llegó a los 45°C a la sombra, tenemos incendiados los dos cerros que rodean al Valle Central (el Ambato y el Ancasti), la luz se corta cada vez mas seguido... por día, el agua en los barrios periféricos no sale de las canillas, y cuando hay, no tiene presión suficiente para subir ni siquiera a las bachas de la cocina.
Tenemos una pobreza espantosa, tenemos un nivel de incultura elevadísimo, y todo esto sumado a los constantes paros de los maestros (mierdas que ya no enseñan sino que revisan los calendarios buscando fechas de paro), de los judiciales (joputas que cobran fortunas para rascarse las bolas y hacer lo que se les canta en horarios de trabajo), de los empleados estatales (que se rascan, pero sin cobrar fortunas) y otros mierdas que exigen al "Gobierno" que les DEN, que les DEN y que les DEN, pero si les ponen un puesto de trabajo vacante, huyen como si hubiesen visto a Satanás con zunga.
En este hermoso marco de "paz social" tan promocionada por nuestro gordito lechón ocioso, se contruyó el Predio Ferial, que hasta el momento sirvió para cuatro cosas:
1-Para la Fiesta del Poncho;
2-Para la actuación del "Bomba" Contreras, un pseudohumorista local a quien alguien le dijo que era gracioso (es insoportable de pesado);
3- Para la Feria del Libro.
4- Para que actúen los Midachi este sábado 14.
Ahora, y como somos una provincia pujante... y nos cagamos por ello, el gordo lechón ocioso que nos gobierna está haciendo construir al frente del Predio, el Estadio Ciudad de Catamarca, monumento a la inutilidad y al despilfarro gubernamental, que está costando no se cuantos miles de millones, y que seguramente alguno se está embolsando, porque las obras lentamente van bajando velocidad. Veremos.

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La luz entregada por esta empresa con participación estatal llamada Edecat, que vive con cortes, y a veces largos, laaargos, laaaaaaaaaaaargos, y en varias tandas.
En casa somos de los pocos que podemos decir "con un ventilador nos arreglamos", a pesar de tener un poderoso equipo de aire acondicionado de 9000 frigorias en nuestra habitación de 2x2 (Mentira).
Para sofocar un poco el calor y los mosquitos, que a la primera brisa tibia aparecieron como legiones de orcos enojados y comandados por el General Grievous y la armada Imperial por detrás, prendemos el ventilador para dormir todas las noches.
En una de tantas, se corta la luz mientras nos acostábamos.
Al grito de "Conchatumadre, Edecat, Sergio Díaz y la Puta que te Parió", buscamos a tientas las velas (Fah! Siglo XXI y a la luz de las velas) o la linterna (Por Dios, que tenga pilas).
Encontramos todo y nos dedicamos cinco minutos a pasarnos el repelente en aerosol para evitar picaduras de cualquier tipo.
Cuando terminamos, y ya en plena caida hacia el colchón, vuelve la luz.
La alegría duró tres minutos, porque se volvió a cortar.
Empezamos a llamar a Edecat, al número de la puta guardia (¿notaron que no atienden nunca, o siempre está ocupado?), dicho sea de paso es el 436100, y en el intento 7401, mi esposa consiguió hablar con un empleado que dijo que "las cuadrillas ya salieron para allá" y que tengamos paciencia. Ella le pidió al empleado un tiempo para que vuelva la corriente y le dijo que mas o menos, una hora más.
Dicho y hecho, tuvimos luz en menos de una hora... pero se cortó otra vez a los quince minutos.
El sueño pudo más, y nos dormimos nadando en repelente, medio intoxicados, y con la Legión 501 de cuerpo armado de mosquitos y afines rondando a poca distancia.

¡EDECAT (distribuidora), SERGIO DÍAZ (administrador), Y GOBIERNO DE LA PROVINCIA DE CATAMARCA, CHUPENMÉ LA PUNTA DE MI SOBERANA VERGA!
¡ESTOY PAGANDO PARA USAR LA LUZ!
¡NO ME LA ESTÁN REGALANDO, MUERDEALMOHADAS CHUPAGLANDES!